jueves, 3 de noviembre de 2011

El secreto (Delfina Acosta)

Delfina Acosta

No sé por qué pero el silencio estuvo 
metiéndose en mis ojos y caía 
igual a alguna herida la llovizna, 
la que muy lejos cae, en mis pestañas. 
Extraña forma de morir aquella. 
Y en el jardín los lirios se contaban 
con voz de viento y hierba las historias 
de otras muertes mías. Los espectros 
de rosas insepultas consultaban 
en torno a mis insomnios. No sabían 
que yo busqué el secreto de la vida 
y Dios en su belleza noche a noche. 
Aquel perfume suyo fue la infame 
respuesta a mis preguntas dolorosas. 
¡Señor, hoy brotan rosas sin embargo 
de la fangosa tierra de mis dudas!

No hay comentarios:

Publicar un comentario